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sábado, 30 de octubre de 2010

CASTANYADA VS HALLOWEN

Harto estoy de escuchar que tenemos que defender y preservar nuestras tradiciones porque son lo que nos diferencia de otros países, y pena me da ver que cada vez quedan menos tradiciones populares que celebrar.Culpa, pues creo que de todos un poco, unos por no difundir nuestra propia tradición y otros simplemente por ni tan siquiera conocerla.

Esta vez hablaré de de la batalla Castanyada vs Hallowen.Y para que los lectores de este blog (mmmm, pocos y poco críticos por los mínimos comentarios que dejáis)  puedan elegir su fiesta, pero sabiendo que celebran y porque lo celebran os voy a dar una breve información del origen  de cada una de ellas.

La Castanyada (en Catalunya, en otras regiones de la península también se celebran fiestas populares donde la figura principal es la castaña y reciben otros nombres como:Magostu,Gaztainerre,Chaquetia...) es una tradición que se viene celebrando desde la Edad Media,  para recordar a todos vecinos la necesidad de rezar por los difuntos. Durante la noche de todos los santos se tocaban las campanas de todas las parroquias y conventos, el campanero necesitaba de un gran aporte de energía para recuperarse del esfuerzo. Al ser la castaña el fruto mas abundante del otoño, se recuperaban del cansancio con castañas y pequeños tragos de vino blanco o dulce (moscatel), para hacerlas más pasaderas. Como el número de campanarios era muy elevado en aquellos tiempos al campanero se iban añadiendo las personas y familiares más allegados, en un afán de querer compartir con él sus penas y también sus gozos, finalmente todos acababan comiendo castañas y bebiendo vino.

Panallets

Mas adelante, en los pueblos, por la tarde todos los hombres se dedicaban a recoger castañas, boniatos y leña, las mujeres hacían pastelitos parecidos a los actuales “panellets” (unos pastelitos hechos a base de almendra molida y azucarada) y al llegar la noche se reunían todos alrededor del fuego comiéndose las castañas y los boniatos asados a la leña y los pastelitos que habían traído las mujeres y así celebraban el final de la recolecta y rezaban por los difuntos.
También existía la tradición de que los niños tenían que dejar castañas escondidas en algún rincón de la casa para que, por la noche, las almas de los que faltaban vinieran a recogerlas y se las cambiaran por “panellets” o membrillo (dependiendo de la zona).

A finales del siglo XVIII la costumbre se había extendido de tal manera que la castaña pasa a ser un elemento de comercio y entonces hace su aparición la figura de las castañeras, mujeres que asan las castañas al fuego y las venden en puestos callejeros.

La fiesta que están exportado los norte americanos como si fuera suya,es la abreviatura de All Hallow’s Eve (víspera del día de todos los santos),  no es más que una reformulación del Samhain, la noche de los difuntos celta y, a su vez, el fin de año para esa cultura. Los celtas dividían el año en dos mitades, la mitad clara, la de las cosechas, y la oscura, otoño e invierno, y el día 31 de octubre era el día que marcaba el cambio de año, pero esto no influye en lo que nos interesa. Como digo también era la noche de los difuntos, porqué esa noche se rompían las barreras entre el mundo de los muertos y el de los vivos, y los difuntos podían salir de las sidh, el otro mundo, para reencontrarse con sus familiares. Hasta aquí todo correcto, ahora llega el punto en el que empiezan los cambios. Todos los difuntos podían salir del mundo de los muertos, por lo que los malos espíritus también vagaban por la tierra atormentando a los vivos. Éstos para evitar problemas lo que hacían era dejar un plato de comida en el portal de su casa, para saciar el hambre de los errantes y evitar ser molestados, hoy en día los niños van disfrazados, como si fuera carnaval, cargados de huevos y llaman a las puertas de las casas para que les den chuches y si no, huevazo va.

Seguramente la tradición llegó hasta EE.UU. mediante los inmigrantes irlandeses, qué tenían muy arraigada la cultura celta. Pero los yanquis con los años la han transformado hasta convertirla en una parodia de lo que era, consiguiendo que pierda todo el sentido. Lo que era una noche de respeto a los seres queridos que nos habían dejado, se ha convertido en un cachondeo, una burla hacía los difuntos.

Los pueblos de origen céltico, como mandaba la tradición ahuecaban nabos u otras hortalizas y ponían carbón en ellos para iluminar el camino de regreso al mundo de los vivos a sus difuntos mas queridos y así les daban la bienvenida a la vez que se protegían de los malos espíritus. Pero cuando los irlandeses llegaron a  América, conocieron las calabazas y se dieron cuenta que estas eran mucho mas grandes y fáciles de ahuecar que los nabos. A partir de ahí la calabaza entro a formar parte de esta tradición. El uso de estas "antorchas vegetales" también tiene su leyenda con la historia de Jack O'lantern, quien después de morir no pudo entrar ni en el cielo por su mala vida, ni en el infierno por pactar con el mismísimo diablo que jamas reclamaría su alma para el inframundo, éste le expulsó de su reino y le condenó a deambular por los caminos con un nabo hueco con un carbón ardiendo dentro como única luz que guiara su eterno vagar entre los reinos del bien y del mal.

Mi objetivo aquí es que mis lectores valoren los principios que dieron pie a estas celebraciones, que valoren que folclore  se merece mas respeto dentro de nuestra comunidad, si una que lleva siglos arraigada a nuestra cultura o simplemente una tradición, que como Papa noel para la coca-cola, se ha creado por  puro negocio, esta  vez de disfraces, artículos de decoración y calabazas. 

La esperanza de mantener estas tradiciones cada vez es menor viendo como en los centros de ocio utilizan el Halloween como reclamo publicitario, como los comercios decoran sus locales y productos por puro marketing, y lo que colma la paciencia es ver como los centros  educativos, allí donde se deberían de fortalecer y fomentar los principios de nuestra historia ,cultura y  tradición, ahora prefieren las fiestas guay de disfraces y terror yankis.

Una cosa digo, ni truco ni trato si quieres caramelos te los compras!!

1 comentario:

  1. Estoy de acuerdo! Hallowen es realmente una estrategia de marketing pura y dura. Nos dicen que compremos trajes, vayamos a fiestas, compremos caramelos y nosotros lo hacemos. Tenemos apoyar mas nuestras tradiciones. Propongo utilizar mas marketing pero en su contra =P

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